La formidable voz del Gancho (1906-1961)
José Oto nació en la calle Casta Álvarez, en el barrio del Gancho.
Empezó a interesarse por la jota a los siete años, gracias a las enseñanzas de su padre, que "cantaba con buen estilo y excelente voz",
según Galán Bergua. Sin embargo, ingresó como tañedor de guitarra y bandurria en la rondalla del maestro Calabia,
que le enseñó también solfeo. Uno de los momentos de revelación de su talento se produjo,
a los pies de la estatua de Alfonso el Batallador, en el Parque Grande: de golpe,
se arrancó cantando fragmentos de las zarzuelas más conocidas del momento y tonadas.
Miguel Asso lo oyó, se quedó fascinado y decidió incorporarlo de inmediato a su cuadro de jota.
Oto hizo su presentación en la plaza de toros en compañía de la gran jotera Jacinta Bartolomé.
Más tarde se integró en la rondalla del maestro Orós, y con ella asistió a la Exposición Internacional de Barcelona.
Allí cantó un día ante Alfonso XIII, que escuchó por primera vez, con perplejidad y embeleso,
esta estrofa tan patriótica: "Quien oyendo un "¡Viva España!" // con un "¡Viva!" no responde, // si es hombre, no es español, //
y si es español, no es hombre". Realizó distintas giras por Francia y Alemania y por todo el territorio español.
Allá donde iba triunfaba con su "voz clarísima y limpísima", como dice José Luis Melero.