Tal vez por la alegría que transmite cuando canta o quizá por el peculiar garganteo de su voz,
se la conoce como la "Golondrina" de Belchite, donde nació hace más de cincuenta años.
Pilar Sanz presume con agradecimiento de sus tres grandes maestros: su tío Natalio Baquero,
Jacinta Bartolomé, profesora de la Escuela Oficial de Jota del Ayuntamiento de Zaragoza,
y, el gran cantador lecerano, Jesús Gracia, referente de toda su carrera.
"No sólo me enseñó la técnica para cantar, también el espíritu necesario para destacar entre otros talentos de la jota,
algo que intento transmitir a mis alumnos", explica Pilar.
Lleva más veinticinco años al frente de la escuela de jota municipal de Belchite. "Durante este tiempo he tenido más de mil quinientos alumnos,
algunos de ellos han merecido varios premios como Erika y Lorena Bronchales o mi propia hija Tatiana Salavera,
entre otros", comenta. Por ello, el Ayuntamiento de la localidad le rindió un merecido homenaje por todos estos años de compromiso con el pueblo.
En su currículum destacan el premio del Concurso Amigos de la Jota Aragonesa de la la Peña El Cachirulo,
a los 8 años, el del Certamen Oficial de Jota de 1969 y la medalla de la Ciudad que le concedió el Ayuntamiento de Zaragoza
con motivo del centenario del citado certamen, además de dos grabaciones discográficas dedicadas a Belchite.
Continúa en activo como cantadora en el Grupo Semblante Aragonés desde hace más 25 años.
