viernes, 22 de mayo de 2009

LUIS GALVE-LP-GRANADOS DANZAS ESPAÑOLAS 1972

Luis GALVE RASO

El pianista aragonés Luis Galve nació en la calle Cádiz de Zaragoza el 10 de marzo 1908 y murió en su ciudad natal el 4 de febrero de 1995 a los 87 años de edad. Sus restos mortales descansan en el pabellón de Hijos Ilustres del Cementerio Católico de Torrero de la capital aragonesa.

Luis Galve fue un niño prodigio del piano. Con tan sólo 5 años ya dio muestras de sus excepcionales dotes al interpretar, durante una fiesta familiar, la Marcha Triunfal de la ópera Aída de Verdi que había oído en el Teatro Principal junto a su padre, algunos años atrás. Sólo un año más tarde actuó en ese mismo teatro para asombro de la sociedad de su tiempo, y poco después, ante el Rey Alfonso XIII en el Palacio Real de Madrid.

Tal era la facilidad con que el pequeño Galve aprendía y era capaz de tocar de memoria las composiciones más difíciles, que su familia, tras recibir clases en Zaragoza de Guadalupe Martínez, hermana del director de cine aragonés Florian Rey, quiso que le oyera Arthur Rubinstein, quien aconsejó a sus padres que lo enviaran a Madrid para estudiar la carrera de Música. Recién cumplidos los 12 años terminó la carrera que había estudiado en sólo dos. Con 16 años amplió estudios en París de la mano del profesor Isidor Philip.

Su concierto en la sala Erad de la capital francesa cuando tenía 20 años, le abrió las puertas de los escenarios de todo el mundo, iniciando así una carrera sólo interrumpida por la guerra civil española, alcanzando un enorme prestigio, ampliamente reconocido por los críticos.

La carrera de Luis Galve es la de un artista de proyección internacional que cultivó la amistad de los mejores artistas de su tiempo: Pau Casals, Manuel de Falla, Arturo Rubinstein, Maurice Ravel, Andrés Segovia, entre otros. Los técnicos han considerado su técnica pianística brillante y de una extraordinaria precisión. Actuó en 68 países y tocó como solista con los principales directores españoles y extranjeros recibiendo los máximos elogios por sus versiones de Scarlatti, Mozart, Beethoven, Mendelssohn, Brahms, Villalobos, Falla y Granado. Manuel de Falla aplaudió personalmente su versión pianística de El Amor Brujo y Turina llegó a decir que "es la vez que he oído Triana de Albeniz tocada con mayor limpieza". Tuvieron gran repercusión, entre otros, sus conciertos con Pau Casals en Puerto Rico, los que dio en el Teatro Colón de Buenos Aires o los Festivales de Granada, música española en la Alhambra de Granada.

Durante uno de sus viajes a América conoció en Argentina a Georgina Jeliciee, hija de un biólogo eslavo, con quien contrajo matrimonio y de la que ya no se separaría jamás. Su esposa se convirtió en compañera inseparable y en su mejor y más sólido apoyo. Fue Galve un artista de proyección internacional que durante bastante tiempo, por necesidades de su carrera de concertista, vivió en París, América, Madrid y finalmente en Zaragoza. Su regreso a la ciudad donde nació era uno de sus mayores deseos que felizmente pudo realizar. Instalado en la capital aragonesa impartió clases a los alumnos seleccionados para las becas Luis Galve instituidas por el Ayuntamiento de la ciudad y vivió la última etapa de su vida rodeada del afecto y admiración de sus vecinos. Fue también en Zaragoza donde, por decisión personal, dio su último concierto con gran éxito en el Teatro Principal.

Hijo Predilecto de Zaragoza y Medalla de Oro de la ciudad, lleva su nombre una de las salas del Auditorio de la capital. Entre las muchas distinciones nacionales y extranjeras que recibió a lo largo de su dilatada vida artística destacan, el Premio Nacional de Música y el premio Aragón de las Artes y la Cruz de Alfonso X el Sabio. Fue Académico de Honor de la Real de San Luis de Zaragoza y correspondiente de las de Valencia y Toledo, miembro del patronato de la Fundación Isaac Albeniz y de Ibercaja.